El proceso terapéutico es un viaje hacia el interior el cual puede estar lleno tanto de cosas gratificantes, así como de dolores expuestos. Pues en ocasiones para sanar heridas es necesario exponer y sacar esos dolores guardados para poder ponerlos fuera de nosotros y sanar. Es muy importante si tu estas en un proceso terapéutico que vayas viendo mejoras, No es magia es trabajo personal tuyo y el de tu psicólog@ que te vaya guiando.
Hoy te dejo estoy puntos claves para saber si elegiste un buen terapeuta y si te esta funcionando las sesiones.
- Claridad en los Objetivos:
- ¿Tienes objetivos claros? Asegúrate de que tú y tu terapeuta hayan establecido metas específicas para el tratamiento. Estos objetivos pueden ser tanto a corto como a largo plazo.
- Conexión con el Terapeuta:
- ¿Te sientes cómodo hablando con tu terapeuta? La relación terapéutica es fundamental. Deberías sentirte seguro/a y comprendido/a al expresar tus pensamientos y emociones.
- Comunicación Abierta:
- ¿Puedes expresar tus inquietudes? La terapia debería ofrecerte un espacio donde puedas hablar libremente sobre lo que te preocupa. Si sientes que hay algo que no estás comunicando, habla con tu terapeuta al respecto.
- Cambios en el Estado Emocional:
- ¿Has notado cambios en tu bienestar emocional? Observa si hay mejoras en tu estado de ánimo, en la gestión del estrés o en la forma en que afrontas los desafíos emocionales.
- Aplicación de Herramientas y Estrategias:
- ¿Estás utilizando las herramientas aprendidas en la terapia? Un aspecto clave es la aplicación de las estrategias que te proporciona el terapeuta en tu vida diaria.
- Mejora en la Funcionalidad:
- ¿Has experimentado mejoras en tu vida cotidiana? La terapia debería tener un impacto positivo en tu capacidad para funcionar en tu trabajo, relaciones y actividades diarias.
- Feedback Abierto:
- ¿Puedes dar feedback a tu terapeuta? La retroalimentación es crucial. Si hay algo que sientes que no está funcionando o necesitas más de ciertos enfoques, comunícalo a tu terapeuta.
- Consistencia en la Asistencia:
- ¿Asistes regularmente a las sesiones? La consistencia en las sesiones puede influir en la eficacia del tratamiento. Si estás cumpliendo con las citas, esto indica un compromiso continuo.
- Autoevaluación Regular:
- ¿Te autoevalúas periódicamente? Reflexiona sobre tu progreso y considera si estás avanzando hacia tus objetivos terapéuticos.
- Evaluar tu Bienestar General:
- ¿Cómo te sientes en general? Observa si experimentas un aumento en tu bienestar emocional y si te sientes más capacitado/a para enfrentar los desafíos de la vida.
Recuerda que la terapia es un proceso gradual y puede llevar tiempo. Sin embargo, si después de un período razonable no notas mejoras significativas o sientes que no hay una buena conexión con tu terapeuta, puede ser útil discutirlo con él o ella y considerar ajustes en el enfoque terapéutico.